Palabras prestadas
Imagina que nace un pez en un acuario. Si le llamas Juan, le extiendes un certificado de nacimiento, le cuentas su historia familiar y dos minutos después se lo come otro pez mayor, eso es una verdadera tragedia. Pero es una tragedia porque has proyectado un yo separado donde no lo había. Has tomado una fracción de un proceso dinámico, de una danza molecular, y has conformado con ello una identidad separada.
La conciencia toma el disfraz de las formas hasta que éstas alcanzan tal complejidad que se pierde completamente en ellas. Entre los seres humanos contemporáneos la conciencia está totalmente identificada con su disfraz. Sólo se conoce a sí misma como forma, y por tanto vive con un miedo permanente a la aniquilación física y psicológica. Es la mente egoísta, que produce una disfunción considerable. Actualmente, da la sensación de que algo ha ido muy mal en el proceso evolutivo, pero hasta eso es parte del juego divino. Finalmente, la presión del sufrimiento generado por esta aparente disfunción obligará a la conciencia a desindentificarse de la forma y a despertar del sueño de la forma: así se recupera la autoconciencia, pero a un nivel mucho más profundo que cuando se perdió. El viaje que transcurre desde la perfección inconsciente, pasando por el "mal" y la imperfección aparente, hasta alcanzar la perfección consciente.
Cuando observas la mente, retiras la conciencia de las formas mentales, y esa conciencia se convierte en el observador o testigo. En consecuencia, el observador (conciencia pura más allá de la forma) se fortalece, y las formaciones mentales se debilitan. Cuando hablamos de observar la mente estamos llevando a la esfera personal un evento de significado cósmico: a través de ti, la conciencia está despertando de su sueño de identificación con la forma y se está retirando de la forma. Esto presagia un suceso (y a la vez forma parte de él) que probablemente aún queda en un futuro lejano. Ese suceso es el fin del mundo.
Palabras prestadas de El poder del AHORA, de Eckhart Tolle. Lectura muy recomendable.